Sobreviviendo a la Navidad
Llegan las Navidades y, con ellas, los numerosos compromisos sociales, entre los que destacan las cenas de empresas y, especialmente, las reuniones familiares. En todos ellos, un denominador común: las calóricas comidas. Las fiestas navideñas no serían lo que serían sin esos alimentos típicos de las fechas, como pueden los turrones o los polvorones. Y para qué engañarnos, a nadie le amarga un dulce y todos, o casi todos, en mayor o menor medida, tienden e permitirse, quizás, más de un capricho. Si a estos pequeños, pero matones en sus calorías, les sumamos el horario especial de muchos gimnasios, tenemos el cóctel perfecto para ver reflejados un par de kilos en la báscula y vernos, estéticamente, desmejorados respecto a semanas atrás.
Son muchas las personas que, ante una situación como la que está por llegar, buscan en internet estrategias, o tips, para sobrellevar las fiestas. Por ello, en este artículo voy a dejar algunas pautas que se pueden seguir, dejando claro que lo realmente importante, lejos de recomendaciones, es la adherencia: la adherencia a un estilo de vida saludable y a un planning previamente establecido. Si se es riguroso en el día a día y se han adquirido unos hábitos determinados, no ocurrirá absolutamente nada porque, en días concretos, disfrutemos no solo de las comidas, sino de nuestro entorno. Recuerda siempre que el cuerpo es inteligente y está capacitado para mantener un equilibrio.
Dejando aclarado el punto anterior, aquí van mis recomendaciones:
1) Mantente activo: Muévete y aprovecha las compras navideñas y los paseos viendo el alumbrado navideño para quemar esas calorías extras que has ingerido el día anterior o compensar las calorías que te esperan en la próxima comida. ¡Camina!
2) El cierre del gimnasio nunca es excusa: Que tu gimnasio cierre antes, o que no abra determinados días, no es excusa para dejar de entrenar. Aprovecha y vete a realizar un entrenamiento diferente, ya sea realizando tu aeróbico por el monte o en un parque en el que encuentres un bar de barras. Recuerda que salir de la monotonía y realizar actividades diferentes no solo es beneficioso para tu cuerpo, sino especialmente para tu mente. ¡No hay excusas!
3) Reduce tu ingesta de hidratos de carbono previa y posteriormente: Un par de días antes, ve reduciendo paulatinamente tu ingesta de hidratos de carbono hasta el día antes de la fecha señalada, donde te alimentarás a base de proteínas, grasas saludables y verduras, exclusivamente. No solo perderás en estos días algo de peso por la retención de líquidos, sino que te dará cierto margen calórico para esa comida que estás esperando. Posterior a la fecha, realiza el mismo procedimiento, de manera inversa, hasta recuperar la normalidad de tu alimentación. ¡Incluso, quizás, puedes terminar la semana en déficit calórico!
4) Sácale partido a las calorías extras: Aprovecha el superávit calórico de estas fechas para mejorar tu rendimiento en los entrenamientos. Esas calorías extras pueden significar un aumento, no solo en los pesos que puedas mover, sino en las series y repeticiones que puedas aguantar. ¡Ve a por tu mejor marca personal en Sentadilla!
En conclusión, ten siempre presente que lo importante es establecer objetivos realistas, a largo plazo y mirar al futuro, sin descuidar el presente. Trabaja duro, sé constante y crea un estilo de vida acorde a tus objetivos. Solo con paciencia se pueden lograr grandes cosas. No rices el rizo más de lo necesario y disfruta: disfruta de tu entorno; disfruta en tus estudios; disfruta en tu trabajo; disfruta del camino y, sobre todo, disfruta vivir.
Javi MMTenerife