¿Qué es lo mejor?
Hoy en día, donde nos encontramos inundados por información de todo tipo y procedente de un amplio abanico de medios, véase redes sociales, Youtube o medios escritos, entre otros, son muchas las fuentes de las que podemos beber y que, no obstante, muchas de ellas suelen contradecirse entre sí: mientras que unos te recomendarán X método para lograr tus objetivos, otros se decantarán por el método Y. Pero, entonces, ¿cuál es el correcto?
Con el paso de los años, si algo he aprendido, es que no existen métodos o fórmulas mágicas que nos aseguren un resultado u otro, de acuerdo al objetivo que busquemos. “Todos los caminos conducen a Roma”, dice el refrán, y no hay mayor verdad que esta. Este estilo de vida que tanto disfrutamos goza de eso: son muchas las alternativas con las que podemos jugar y experimentar y, únicamente, dependerá de nosotros encontrar aquella con la que nos sintamos cómodos, disfrutemos y aquella que podamos adaptar a nuestro día a día. Piensa en esto: ¿de qué te sirve optar por el método de ese famoso entrenador si vas a tener que sacrificar tiempo con tu familia?; ¿no existirá otra alternativa que te permita realizar una planificación disfrutando cada momento con los tuyos? No es que no se deban hacer esfuerzos y ciertos sacrificios, pero dependerá de nosotros ver si estos nos compensan. En la vida, no todo es blanco o negro, también existe una amplia gama de grises.
Quiero que te des cuenta que cada uno de nosotros somos diferentes: a nivel genético, a nivel psicológico, a nivel laboral-económico y, por supuesto, a nivel familiar. No quiero que te bases en la reputación de ese entrenador, en la compra masiva de suplementación o en realizar un ayuno intermitente frente a cinco comidas diarias. Opta por aquello que puedas extender en el tiempo y que puedas convertir en un hábito y opta por aquello que te haga, realmente, feliz, tanto a ti como a la gente que te rodea. Por último, y más importante, nunca te rindas porque, si bien unos llegarán antes que otros a sus metas, por las circunstancias que sean, todos, desde el esfuerzo, el trabajo, la disciplina y la constancia alcanzaremos nuestros objetivos. Habrán momentos muy duros y muy oscuros en el camino, en los que queramos dejarlo todo porque no encontramos la manera de seguir avanzando y será, en ese momento, donde debamos demostrar de qué pasta estamos hecho: la pasta del perdedor o la pasta del campeón.
Javi MMTenerife