Proteína en polvo: ¿suplemento o alimento?

En el artículo de esta semana hablaremos sobre la proteína, el producto más famoso y más consumido en el mundo fitness. Sin embargo, ¿hemos de considerarla un suplemento como cualquier otro o, quizás, deberíamos considerarla un alimento más?

La proteína en polvo, también conocida como “whey protein” (nombre en inglés), es una proteína obtenida a través del suero de leche, un subproducto obtenido gracias al proceso de elaboración de algunos quesos. A medida que su proceso de filtrado es de mayor calidad, podemos obtener diferentes tipos de proteínas, destacando el concentrado de suero de leche, el aislado de suero de leche y el hidrolizado de suero de leche. La principal diferencia entre ellas es la velocidad y facilidad de digestión y asimilación que de ellas hace el organismo y no tanto la presencia de unos pocos gramos más, o menos, de hidratos y grasas. Así, ordenadas de menor a mayor velocidad, facilidad y asimilación, tendríamos: concentrado > aislado > hidrolizado.

Sin querer profundizar en la proteína como tal, lancemos una pregunta: ¿hemos de considerarla un suplemento al uso o un alimento más? Lejos de su perfil de aminoácidos, digestibilidad y facilidad de ingesta, la “whey protein” cumple con la función principal de poder obtener la cantidad diaria de proteína que cada persona, en base a sus requerimientos calóricos y reparto de macronutrientes, necesita. Es decir, este producto no garantiza un aumento de masa muscular, una mejor recuperación, un aumento de fuerza o similares, pero sí contribuye en gran medida a posibilitarlo. Para ejemplificarlo, veamos el siguiente caso: si una persona toma proteína en polvo, pero luego no cumple con el objetivo diario que necesita, su cuerpo no será capaz de recuperarse o sintetizar nuevas proteínas, por lo que fracasará en su objetivo (sea el que sea).

Hemos de tener claro que la proteína “whey” ayuda, como cualquier otra fuente de proteína (carne, pescado, huevos…), pero no hace milagros. Con esto, en absoluto, queremos desaconsejar su uso o querer obviarlo, pues consideramos interesante el poder tener una fuente de proteína rápida, cómoda y, por qué no, rica y con la que poder asegurarnos cumplir con nuestros requerimientos diarios, lo cual es uno de los principales problemas de los que adolece la población: no cumplir con la ingesta recomendada en base a los objetivos que posean.

Infórmate, déjate asesorar y supleméntate con inteligencia.

Javi MMTenerife