En volumen, no todo vale

Si eres de los recién apuntados al gimnasio y tu objetivo es la ganancia de masa muscular, el artículo que hoy redacto te interesa. Con toda probabilidad, y conociendo de antemano las recomendaciones de, no toda (por suerte para la comunidad), pero sí una gran parte de los “expertos” fitness que puedas encontrar en la sala, te habrán recomendado el mítico “come mucho y entrena”. Por desgracia, pese a que, de manera general, la premisa es correcta, las pautas no son las correctas.

Sumergiéndonos en el tema que hoy trato, en un período de volumen, no todo se reduce a comer mucho y salir extenuado de la sala de musculación. De buenas a primeras, si eres novato, no has seguido una pauta de alimentación y no has realizado ningún tipo de ejercicio destinado al aumento de masa muscular, no puedes arrancar como pollo sin cabeza, realizando ejercicios de los que no conoces la técnica, con pesos que no puedes mover con seguridad y comiendo todo lo que encuentres a tu paso, simplemente porque “estoy en volumen”. Lamentablemente, este camino solo te llevará al desarrollo de dolencias musculares y articulares y a un aumento de peso que, tenlo claro, ni la mitad será músculo de calidad.

Siendo un recién iniciado tienes una oportunidad de oro para comenzar el camino de manera correcta. Para ello, una de las primeras cosas que debes saber, es que el cuerpo tiene un límite para crear tejido muscular y que, por mucho más que le proporciones, no va a ser capaz de construir más y, por desgracia, si tenderá a acumular más grasa, más líquido y desechar también otra parte de lo suministrado. Por otro, deberás organizar y programar un sistema de entrenamiento que te permita progresar, ya sea en términos de kilos a mover, series o repeticiones ya que, de lo contrario, si realizas siempre lo mismo y no existe progreso alguno, tu cuerpo no se verá sometido a esfuerzo alguno y buscará una rápida adaptación, consiguiendo que no existan ganancias ni en fuerza ni masa muscular.

Para finalizar y, a modo de resumen, os dejaré unas pequeñas pautas generales que os sirvan para comenzar con buena letra el camino hacia vuestro objetivo estético deseado y que, si pudiera retroceder el tiempo atrás hasta mi primer día de gimnasio, me hubiera gustado recibir de alguien:

1) Alimentación: Calcula las calorías que necesitas para mantener tu peso actual y, en base a ellas, establece un ligero superávit en ellas, buscando un óptimo reparto de macronutrientes (proteínas, hidratos de carbono y grasas).

2) Entrenamiento: Busca el sistema de entrenamiento que mejor se adapte a tu estilo de vida y una programación que te permita el progreso a largo plazo, obteniendo mejoras a nivel de fuerza y de masa muscular.

3) Descanso: Nunca subestimes el descanso. Tu cuerpo se regenera y recupera cuando descansa. En este sentido, asegúrate de dormir las horas necesarias y reservar algún día de descanso activo, donde realices otro tipo de actividades que no demanden un desgaste físico excesivo y sirvan para, aún estando activo, desconectar de la rutina, especialmente a nivel mental.

Javi MMTenerife